EL stop loss en el trading es una orden que das al broker para “detener pérdidas” (“stop loss”).

La regla de oro de la especulación en Bolsa es mantener el riesgo siempre bajo control. Para ello, has de saber cuánto estás dispuesto a perder antes de comprar tus acciones.

Una vez que conoces o decides esa cifra, darás una orden a tu broker para abrir la posición.

Además, inmediatamente después de dar la orden de compra, deberás dejar también un stop loss, que es una orden de venta que sólo se ejecutará si el precio cae lo suficiente como para causarte tu pérdida máxima admisible. En cuyo caso, tus acciones serán vendidas antes de sufrir males mayores.

Has de saber que las órdenes que no se ejecutan son gratis; así que controlar el riesgo en tus operaciones bursátiles no te costará nada, pero sí te ahorrará muchos disgustos.

Operar en Bolsa sin un stop loss es como conducir un coche sin frenos. Utiliza siempre un stop loss.

Una vez que el precio alcanza el nivel que se ha colocado para el límite de pérdida, la transacción se cerrará automáticamente, así el comerciante se ahorrará el dinero restante y podrá comenzar a desarrollar un plan para devolver el dinero que ha perdido. El comerciante es el único responsable de asignar el nivel deseado para su Stop Loss antes de abrir cualquier operación. De este modo, el límite establecido siempre estará vinculado a un precio determinado (con la excepción de los límites de pérdida por tiempo. Te hablaremos de ellos más adelante).